Orquesta Sinfónica de Castilla y León
PROGRAMA
Ludwig van Beethoven (1770-1827)
Sinfonía nº 5 en Do menor, op. 67
Franz Schmidt (1874-1939)
Sinfonía nº 2 en Mi bemol mayor
-Primera vez por la OSCyL-
Hay algunas obras del repertorio que podemos considerar obras maestras y cuya grandiosidad sigue siendo un aliciente en los conciertos tanto para los melómanos más eruditos como para los legos en la materia. Este es el caso de la Quinta de Beethoven, una de esas obras que ganan en cada audición y cuya repercusión e importancia histórica están fuera de duda. Si a esto añadimos la batuta de Semyon Bychkov, quien ya dirigió la Séptima del maestro de Bonn la pasada temporada y cuyas apariciones en público han recibido los mejores elogios, está claro que nos encontramos ante uno de los platos fuertes de la temporada. Su composición, tras unos primeros esbozos en 1804, fue completada en la primavera de 1808 y estrenada en diciembre del mismo año en el teatro vienés An der Wien bajo la dirección del propio compositor. “El destino que llama a la puerta” –el conocido motivo rítmico con el que se inicia la sinfonía y que reaparece en diferentes momentos en el resto de los movimientos– simboliza la dramática lucha de la humanidad contra su propio destino que tanto atormentaba al compositor.
La Sinfonía nº 2 de Franz Schmidt, considerado un seguidor de Bruckner de quien fue alumno, es un ejemplo de su dominio del lenguaje orquestal, sin duda fruto entre otras razones de su labor como primer violonchelo de la Ópera de Viena al frente del mismísimo Gustav Mahler. Fue recibida con gran éxito en su estreno en 1914 lo que supuso un merecido reconocimiento frente a todos los que criticaban su conservadurísmo en comparación con las libertades expresivas de su coetáneo Mahler. El dispositivo orquestal que requiere esta sinfonía, la más larga de las cuatro que compuso, supone un desafío para cualquier orquesta.